Durante décadas, el ácido butírico se ha utilizado en la industria de piensos para mejorar la salud intestinal y el rendimiento animal. Desde los primeros ensayos realizados en la década de 1980, se han introducido nuevas generaciones para mejorar el manejo del producto y su rendimiento.
Durante décadas, el ácido butírico se ha utilizado en la industria de piensos para mejorar la salud intestinal y el rendimiento animal. Desde los primeros ensayos realizados en la década de 1980, se han introducido nuevas generaciones para mejorar el manejo del producto y su rendimiento.
1 Desarrollo de ácido butírico como aditivo alimentario
Década de 1980 > Ácido butírico utilizado para mejorar el desarrollo del rumen
Sales de ácido butírico utilizadas para mejorar el rendimiento animal en la década de 1990
Años 2000 > Se desarrollaron sales recubiertas: mejor disponibilidad intestinal y menos olor
Década de 2010 > Se introduce un nuevo ácido butírico esterificado y más eficiente
Hoy en día, el mercado está dominado por el ácido butírico bien protegido. Los productores de piensos que trabajan con estos aditivos no tienen problemas de olor y su efecto en la salud intestinal y el rendimiento es mejor. Sin embargo, el problema de los productos recubiertos convencionales reside en la baja concentración de ácido butírico. Las sales recubiertas suelen contener entre un 25 % y un 30 % de ácido butírico, una cantidad muy baja.
El último desarrollo en aditivos alimentarios a base de ácido butírico es ProPhorce™ SR: ésteres de glicerol de ácido butírico. Estos triglicéridos de ácido butírico se encuentran de forma natural en la leche y la miel. Constituyen la fuente más eficiente de ácido butírico protegido, con una concentración de hasta el 85 %. El glicerol puede unir tres moléculas de ácido butírico mediante los llamados "enlaces éster". Estas potentes uniones están presentes en todos los triglicéridos y solo pueden romperse mediante enzimas específicas (lipasa). En el buche y el estómago, la tributirina permanece intacta, y en el intestino, donde la lipasa pancreática está fácilmente disponible, se libera el ácido butírico.
La técnica de esterificación del ácido butírico ha demostrado ser la forma más eficiente de crear ácido butírico inodoro que se libera donde se desea: en el intestino. Las diferencias con las sales recubiertas se enumeran en la figura 2.
En la 20.ª edición de ESPN en Praga, se presentó un estudio comparativo sobre el efecto de dos aditivos diferentes a base de ácido butírico en pollos de engorde. El ensayo se realizó en el centro de investigación ADAS del Reino Unido en 2014. Se comparó una sal sódica recubierta (con un 68 % de recubrimiento) con ProPhorce™ SR 130 (55 % de ácido butírico). Se dividieron 720 pollitos machos Coss308 en tres grupos, con 12 corrales de 20 aves por grupo. Para simular al máximo las condiciones comerciales, se añadió cama sucia tras una evaluación patológica parasitológica, bacteriana y viral.
Función de la tributirina
1. Repara las vellosidades del intestino delgado de los animales e inhibe las bacterias intestinales dañinas.
2. Mejora la absorción y utilización de nutrientes.
3. Puede reducir la diarrea y el estrés del destete de los animales jóvenes.
4.Aumenta la tasa de supervivencia y la ganancia de peso diaria de los animales jóvenes.
Hora de publicación: 28 de julio de 2021

